El Scott Challenge 2014 fue una experiencia llena de sensaciones superpositivas y placenteras. Quizás este fue uno de los motivos que me ayudó a repetir a pesar de que la distancia mayor de 20 km de la edición anterior había sido eliminida quedando solo la de 10 km. ¡A ello!
Gran parte del X Bionic Team Spain estábamos por allí, incluído nuestro entrenador: Héctor Carmona, David Gonzalez, Fran, Lau y yo. Luis Pereira también nos acompañaba además de tener el detalle de llevarnos hasta Colmenar Viejo donde se disputaba la prueba. Listos en linea de salida, la prueba empezaba y terminaba en la pista del polideportivo del lugar, atravesando caminos más bien naturales en un paraje fantástico para correr. Cuenta atrás y ¡pum! salimos hacia delante. Me lanzo un poco más controlando mi propia salida y buscando rapidez y buenas sensaciones, cosas que a nivel general muy pocas veces suelen convivir.
Abandonada la pista pisamos asfalto y veo a mi amiga del cole, Nuria Valero con su perrita. Sin duda su chico y ya casí esposo Alfonso estará corriendo. Atravesamos unos tres kilometros de asfalto con pendiente descendente que ayudaría a coger un buen ritmo para entrar en una parte de tierra que haría más disfrutona la carrera. Allí conozco algún integrante de la carrera al que animo y con el que compartiría varios kilometros. Al final de una de las intensas pendientes estaba el avituallamiento que ignoré de manera consciente: la fuerte cuesta me había obligado a tener una respiración rápida y acelerada y beber agua era lo último que me pedía el cuerpo.
Subidas y bajadas con desnivel considerable, convertían la prueba en algo bastante duro. Pero irónicamente alcancé de nuevo ese grado de "abstracción" que tanto busco siempre. Esa burbuja que permite a la mente desconectar y estar conectado a todo a la vez. En ese estado, todo fluye, todo va en armonía, la respiración y la zancada conviven y el mero hecho del aire en la cara te hace sonreír. Fue alcanzar esa sensación la que una vez más me hizo disfrutar de la prueba. Y ojalá nunca la pierda.
Aguanto a buen ritmo sobre el camino de tierra cuando pisamos asfalto mientras pasamos por puntos del recorrido en el que la organización había dispuesto gente para informar del recorrido. Allí gano algo más de ritmo por el terreno más homogéneo aunque ya, desde ahí a meta, es todo subida. Pero el optimismo y el tesón me harían aguantar hasta la pista donde entraría 22º de la general con 43:02 y más que satisfecho.
Fran entraría con Laura más tarde y que ganaba la prueba en su categoría femenina, ¡muy grande! Luego saldríamos en busca de un Luis Pereira que terminaría de manera muy intensa guardando una particular y especial energía en su final. Encuentros con Nuria y Alfonso y su peludita pondrían la guinda a un pastel muy delicioso.
Bebida, camiseta y bocadillo en una carrera en general muy bien organizada.
¡Repetiremos!
¡Caballo ganador! |
¡Comenzamos! (¿Eh Luis Pereira?) |
Abandonada la pista pisamos asfalto y veo a mi amiga del cole, Nuria Valero con su perrita. Sin duda su chico y ya casí esposo Alfonso estará corriendo. Atravesamos unos tres kilometros de asfalto con pendiente descendente que ayudaría a coger un buen ritmo para entrar en una parte de tierra que haría más disfrutona la carrera. Allí conozco algún integrante de la carrera al que animo y con el que compartiría varios kilometros. Al final de una de las intensas pendientes estaba el avituallamiento que ignoré de manera consciente: la fuerte cuesta me había obligado a tener una respiración rápida y acelerada y beber agua era lo último que me pedía el cuerpo.
Subidas y bajadas con desnivel considerable, convertían la prueba en algo bastante duro. Pero irónicamente alcancé de nuevo ese grado de "abstracción" que tanto busco siempre. Esa burbuja que permite a la mente desconectar y estar conectado a todo a la vez. En ese estado, todo fluye, todo va en armonía, la respiración y la zancada conviven y el mero hecho del aire en la cara te hace sonreír. Fue alcanzar esa sensación la que una vez más me hizo disfrutar de la prueba. Y ojalá nunca la pierda.
¡Satisfacción completa! |
Smilingboy! |
Bebida, camiseta y bocadillo en una carrera en general muy bien organizada.
¡Repetiremos!
Hola Juanqui!! Tiene pinta de ser divertida esa carrera, buena para hacer patas. Me alegro de que sigas disfrutando. Un abrazo
ResponderEliminarJooo como me gustaría entrar ese estado que tu entras en las carreras cortas, porque yo entro pero empicado y en barrena jajaja.
ResponderEliminarGrande amigo, como siempre.
¡Fantástico Juanqui! como controlas las sensaciones..felicidades, siempre al máximo nivel.Un abrazo
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