22 may 2012

II Trofeo Menudos Corazones (10 Km y 5 Km)

¡De nuevo en Hortaleza! ¡Y a por los 5 km!

Desde el año pasado que empezó esta carrera, siempre me ha hecho ilusión: la carrera de nuestro barrio. He tratado de ayudar todo lo posible a difundirla de cualquier manera. Y creo que poco a poco se va a ir haciendo grande.

Después de pasear con mi eléctrico socio Athos, le dejo en casa junto a Carol, que no iba a poder venir por tener ensayo. Cojo la mochila preparada y voy en busca de Fran y los demás. Jose nos esperaba ya en San Lorenzo (¡Gracias Jose!) con el coche y luego llegaría LauraRun & CO. Llegada a Valdebebas y con el tiempo más o menos justo nos dirigímos hacia la salida donde habíamos quedado con Schumy. Allí nos espera con Auro, Encarni y Ramón.

Me encuentro con los grandes amigos trotones, prestos a la carrera mientras vamos a recoger el chip. Encuentros muy agradables con la gente del muro, entre ellos David que nos auguran buenos tiempos, pero no me quiero confiar (¡aunque un día debería animarme a ello!).

Calentamiento y a linea de salida. Allí colocados y espectantes a la salida, Mario y Schumy me animan a ponerme en primera linea... pero no puedo ponerme ahí, no veo mi hueco tan adelante. Alguien me saluda reconociéndome por el blog: -"Tu escribes en Otra forma de correr ¿verdad?". La verdad que me hace ilusión. Se trata de Miguel Angel, magnífico corredor que más tarde haría un gran 11º puesto en la carrera de los 10 Km.

Lanzado junto a Schumy, Fran, Mario y Jose detrás de mí

Inesperadamente y sin cuenta atrás se da la salida. Hemos echado en falta una cuenta atrás. Salgo como una bala buscando un hueco cómodo y colocándome al lado derecho como casi siempre hago. Me veo bastante ligero y en solo unos segundos voy delante del todo, solo por detrás de 8 corredores, cuando de nuevo me inunda el pánico: "¿Qué hago yo aquí?". Me asustan esas posiciones y no veo a Schumy cosa que me sorprende más, cuando justo aparece por mi izquierda. Guay, como en los viejos tiempos, vamos juntos a buen ritmo, cercano a los 3:30, y en la bajada a un frenético y alocado 2:50. Schumy es una computadora humana en cuanto a tiempos, ritmos y distancia se refiere y sin GPS que se lo chive: va detallándome como vamos y aquello casi me asusta. El muy cachondo me suelta cómicamente la frase, "se nos va de las manos". Cercanos al kilometro 2, pasámos a un corredor al que le lanzo ánimo mientras me pregunta si somos del 5.000 o del 10.000. ¡Vamos 6º y 7º!

Like old times!
La verdad que voy flipando porque voy al lado de Schumy y para mí eso es una pasada. La cabeza me dice que voy muy rápido, pero a veces el miedo nos nubla la mente y nos limita las posibilidades y eso es algo que tengo que cambiar, porque aguantando genial con él hasta mitad de carrera, me empiezo a descolgar pasado el kilometro 2,5. Subiendo la cuesta aguanto la distancia. Para los pedazo ritmos que llevábamos manejando me veo bien. Voy con mi sonrisa puesta en la cara, disfrutando una animalada de cada zancada mientras me acuerdo en la alegría de los tarahumara corriendo en Nacidos para correr.

¿Se nota que me gusta correr?

Carol y Athos inundan mi cabeza impulsándome hacia adelante y la recientemente visionada, culpable y ochentera Quicksilver de Kevin Bacon, coloca en el reproductor de mi cabeza el potente tema de Peter Frampton, Nothing at all. Voy muy rápido. Más que otras veces. Al paso por el kilometro 4, Schumy me saca cerca de 40 metros. Me encuentro con Auro, Encarni y Justi animándonos a tope ¡gracias!. Al giro para la recta final, Juan de La Panda del Muro me anima mogollón ¡más gracias!. No queda nada y mi sonrisa me eleva por doquier. Llego marcando 16:02 en una distancia real de unos 4.500 m en... ¡4ª posición! ¡Schumy 3º y 1º local! Fran llega detrás en 8ª posición, ¡Enhorabuena man, Top Ten! 


¡Satisfacción!
Rápidamente nos abrigamos y vamos en busca de Jose para animarle los últimos metros. Justo en el kilometro 9 aparece en 11ª posición, y nos ponemos a su lado hasta el final, menudo crack está hecho, fuerte como un toro. Termina en 10ª posición. ¡Grande Jose!
Trío de ases
"Viajando al pasado", con Schumy

De nuevo veo a Miguel Angel al que voy a felicitar cuando aparece Luís Blanco, periodista, speaker de la carrera y locutor de radio de entre otros programas "A tu ritmo". Me lo presenta y me dice que me lleva fichando en varias carreras que corre porque quedamos en tiempos parecidos, ¡y qué va a por mí! ¡Un placer Luís!

En la entrega de premios se menciona que todos los fondos van para la Asociación Menudos Corazones, CARRERA 100% Solidaria señores, todo un ejemplo para otras.

Gracias a Sebastián Navarrete de fotorunners.blogspot.com.es por el mágnifico trabajo desinteresado que hace siempre.

Felicitar a la organización, cada año mejor que el anterior, y mención especial a Jose Manuel, el principal impulsor: GRANDE TÍO.

No hay duda que repetiremos.




Ruta para correr 981232 - powered by Runmap 




Valoración final en
 El Calidómetro


16 may 2012

Calcetines X Shocks Speed Metal

Nunca he llevado calcetines especiales para correr. Pero estos llevaban mucho tiempo atrayendo mi atención. En la feria del corredor de la Media Maratón de Madrid 2012, los adquirí con Javi "Potro Extremo" Corredera, bien asesorado por Hector Carmona y con la intervención de Nestor de <<X>> Socks (gracias de nuevo).

Esto es ventilación, y no la de la oficina
Los <<X>> Socks Speed Metal, son unos calcetines de muy alta gama que tienen en sus entrañas, más tecnologías que mi scooter:

· La fibra metálica o hilo de plata Xitanit, reflecta y conduce el calor y exceso de sudor.

· Los Air conditioning channels, conducen el calor desde zonas calientes a zonas más frías del calcetín.

· El Traverse airflow channel utiliza el empeine, como bomba natural de calor, para extraerlo fuera.

· Protecciónes en zonas clave del pie, como puntera, talón...

· Sujección especial en la zona del talón de aquiles.
· Son muy cómodos.

Hay que prestar importancia a la colocación en el pie, uno siempre es el izquiero y otro el derecho, viene bien indicado ("L" y "R"). Son una pasada. Obviamente, este tipo de accesorios no van a mejorar tus marcas, pero si hará que las hagas más cómodamente.


Valoración final en
El Calidómetro




7 may 2012

Athos

Eran uno, dos y... YA.

Aunque no es así como reza esa famosa canción en nuestro caso si. (¡Bueno vale con Carol si somos los tres, jejejeje!)

Hace tiempo que tengo ganas de hablar por aquí de Athos.

La historia de Athos se remonta (en nuestra imaginación y lógica) a un cachorrito de galgo, color canela, que en sus ansias de disfrutar la vida, acaba escapándose de su lugar de nacimiento para posteriormente sufrir el atropello de un vehículo que le fracturaría el fémur y obviamente le haría vagar por la calle durante un par de meses y de manera solitaria en busca de alguién que le ayudara. Alguién le encontró (gracias) y le llevó a la perrera de la Fortuna en Madrid (no podía tener mejor nombre como dice). Allí su fémur soldaría, no de buena manera, de forma natural, con la esperanza de que alguien le diera mejores condiciones que las de una perrera. Poco tiempo después, Karol y Raquel, fundadoras de Dejando Huella, lo vieron y se quedaron prendadas de él. Lo recogieron, lo cuidaron, lo operaron y colgaron alguna foto de él con la que quizá, alguna persona se sentiría identificado o "enamorado" de aquel galguito cuyas energías y ganas de vivir le habían causado aquella situación.

Y ahí es donde entra Carol, mandándome vía email un foto de Athos vista en facebook. Llevábamos con ganas de adoptar un galguito y aunque en aquel instante no era el momento adecuado, nos quedamos prendados de él, de su mirada profunda que nos decía, "Dame solo un poco y yo te daré mucho más". Así lo hicimos. Tras un par de entrevistas con Karol y Raquel, vieron que nosotros y nuestro entorno eramos y era el adecuado para Athos. Carol y Karol dicen que siempre han visto una "conexión especial" entre Athos y yo, desde el primer paseo sin conocernos de nada. Y Carol sigue diciéndomelo.

Llegó a nuestra casa el 2 de diciembre, aún recuerdo los nervios que teníamos los dos. Con la patita aún sin apoyar, se amoldó perfectamente a nosotros, que nos volcamos con él. Poco a poco y con esfuerzo ha ido apoyando su patita ya soldada y aunque siempre tendrá una ligera minusvalía en ella, a nosotros nos vale con verle feliz y con esa energía que reparte a borbotones.

No dudé en sacarle a correr conmigo. Desde el primer instante y al igual que cuando nos vimos por primera vez, supe que aquello era algo que nos hacía felices, sobre todo al compartirlo juntos.

Listos para disfrutar juntos
Y es que Athos es alguien que me ha enseñado Otra Forma de Correr, de afrontar adversidades, de disfrutar la vida, en definitiva, una filosofía de vida que deberíamos copiar para muchas cosas. Algo no solo innato en Athos sino en practicamente todos los de su especie.

Algo que los humanos hemos ido perdiendo poco a poco y no nos deja disfrutar al 100% de la vida, ese afán por disfrutar el momento, sin ambicionar demasiado, disfrutando de las cosas no materiales, que son realmente donde reside LA AUTÉNTICA RIQUEZA DE LA VIDA, algo que jamás se podrá comprar: uno tiene que ganárselo y saber como hacerlo. No es fácil, pero si lo consigues, te conviertes en el HOMBRE MÁS RICO DEL MUNDO.

Athos derrocha energía y felicidad por igual y ver su cara cuando llego del trabajo y me pongo las zapatillas para ir a correr, es la cara viva de la esperanza, de la verdadera riqueza del que disfruta con las cosas esenciales y naturales que hemos ido olvidando en nuestra escalera hacia la "evolución" y hace que cada vez, nuestra especie sea la menos evolucionada y se aleje más de sus verdaderos orígenes.

Cuando crees que disfrutas corriendo, porque te sientes bien y hasta sonríes, sales con Athos y descubres la VERDADERA FELICIDAD DEL CORRER. A veces me transmite tan buen rollo corriendo a mi lado y "sonriendome" que no puedo evitar estallar en carcajadas... de verdad, es algo digno de vivir.

¡"Socios"! (¡Y grandes amigos!)
Es cierto que muchas veces me cuesta e incluso tengo que tirar de él porque no entiende de momento porque corremos: como buen galgo, espera correr detrás de algo y no comprende la idea de correr sin más. Por eso digo que es un "picao": cada vez que aparece un corredor por delante acelera y hasta que no le pasamos no desaparece la intensa energía que arde en su interior. Una energía que día a día me transmite.

A falta de 500 metros para llegar a casa cuando ya vamos soltando, no puedo evitar mirar y decirle "te echo una carrera", para acabar esprintando los dos juntos como auténticos locos al ritmo de Bad Boys de Whitesnake.

Gracias amigo, por enseñarme tantas cosas en tan poco tiempo. Te quiero "socio".