La verdad que no tenía pensado correr esta carrera. Parecía bastante cara para ser encima la 1ª edición y que costara 15 €. Pero al final, digamos que el Mister, Hector Carmona, hizo todo lo que pudo como siempre hace: me regaló el dorsal, todo un detalle. ¿Merecería la pena? Vamos a averiguarlo.
Llevaba una semana relizando otra vez entrenos exigentes y pudiendolos finalizar satisfactoriamente, a pesar de la poca confianza que tengo en mi: el Mister se fía más de mí que yo mismo.
Así que el 17 de junio estaba ahí, a primera hora con Carol en la desierta CasteLLANA, solo frecuentada por los runners que iban a la carrera y que no eran muchos. Así que haciendo un poquito de tiempo antes de calentar, y al son de la megafonía, Carol y yo nos echamos una salsita, ¡jajajaja! ¿que mejor para bailar los nervios que un poquito de buen humor ante la atónita mirada de varios runners?
¿Por qué no comenzamos baliando? · Schumy y yo junto a miguel Macías |
Ya por el 3º Km he cogido un ritmo bastante bueno y me mantengo en mi posición viendo a unos 14 corredores en cabeza, entre ellos Schumy: me arranca una sonrisa verle tan arriba. Recuerdo esos entrenos y la perseverancia de hacerlos y la alegría de terminarlos: eso también te hace tirar hacia arriba.
Poco a poco vamos subiendo y mientras me pasan un par de corredores, adelanto a la vez a otro mientras le ánimo a seguir: ¡vamos, ánimo!. Empiezo a ver las Torres Kio al fondo, señal inequívoca del ecuador de la carrera, pero bajando la cabeza y mirando a tan solo unos metros por delante sigo pegandole caña manteniendo la calma, las fuerzas y yendo a un ritmo nada sufrido: la batería más grande en mi cabeza, Carol y Athos me transmite energía poco a poco.
Llega el giro hacia abajo, y aquello cambia de color: mientras empiezo a bajar, cojo aire, sé que apretaré más y que no debo dejarme llevar en exceso por la caída sino controlando en todo momento. En el avituallamiento cojo la botella, doy un trago y me mojo las piernas y la cara para darle otro trago y tirarla al contenedor. Veo a Mario subir hacia el KM 5 y le grito lanzándole ánimos. La estela negra de "gatos" asciende por el carril contrario y no puedo evitar gritarles también: ¡ánimo gente, ya queda menos! Mentiría al decir que me sobra el aire, pero no. Aún así, la reconfortante respuesta y aplausos que te devuelven los corredores te arenga a gritarles de nuevo esos ánimos, esa energía y es que aquello me atiborra de adrenalina como para ponerme a bajar más rápido: ¡Vamos genteeeeeeeeee!
Sigo vislumbrando a Schumy y los dos corredores más cercanos a mí empiezan a caer. Suena en el "reproductor" el famoso temita de eurovisión Euphoria que me pone a tope y tira de mi. Poco a poco sigo, con la sonrisa en la cara, esperando el final, deseando ver allí a Carol.
Salida rápida y metido en "mi burbuja" · Final rugiendo como un León (melena incluída) |
Llega Colón, llega el momento, suenan trompetas de júbilo en mi cabeza y la emocionante "Se que llegaré" de Disney, pega el play en mi cabeza: ¿Cómo explicar el torrente de energía que puede descargar una canción en tu cerebro? Pues supongo que la letra y el significado de esta me ponen los pelos de punta. Ya la "utilizé" en los entrenos y me ha funcionado. Si le sumamos que vislumbro a Carol cámara en mano, aquello es Adrenalina En Bruto. ¡Vamos dale! Me grita junto a Auro, mientras un par de palabras salen de mi boca, la emoción no me deja más, esprinto como un loco marcando un 37:16, en 15º puesto general y 9º de mi categoría. Allí me espera Schumy que ha logrado un 4º puesto con 35:30. ¡Mario llega marcándose un estupendo 39:11!
Siempre a mi lado, gracias · Nuestras campeonas · Con Jorge de la Energizer |
Allí en la llegada, coincído con Jorge de la Energizer Night Race con quien compartí un emocionante sprint y una buena foto: un placer volver a vernos compañero ¡qué casualidad!
Carrera bien organizada pero con un precio nada razonable (mírenselo para el año que viene), pero que al fin y al cabo supimos disfrutar, sacándole todo el jugo posible. ¿Qué mejor manera de culminar aquello que tomando una cervecita en una estupenda terraza y... en la piscinita con Carol y Vane?
Carrera bien organizada pero con un precio nada razonable (mírenselo para el año que viene), pero que al fin y al cabo supimos disfrutar, sacándole todo el jugo posible. ¿Qué mejor manera de culminar aquello que tomando una cervecita en una estupenda terraza y... en la piscinita con Carol y Vane?
"El Descanso del Guerrero" |
Valoración final en