Con previsión de lluvia y con un frío que "pela", los cuatro motorizados surcábamos la Castellana, en busca del Parque del Retiro donde se celebraba la 6º Carrera Ponle Freno. Allí con las motos aparcadas y no con mucho tiempo de sobra, a 30 minutos para la salida, Carol, Lau, Fran y yo nos quedábamos con el traje de batalla y en mi caso un poquito de Galius Sport gel de precompetición para las carreras más frías. 3ª carrera de la temporada camino de la "Gran Vallecana".
Camino hacia la salida hacemos el calentamiento más corto de nuestra historia, pero si queremos colocarnos bien no hay más: no es que fuera lo más correcto pero así sale la cosa. Supongo que lo mismo debían pensar las corredoras, que con todo mi respeto, no debían estar allí colocadas: "Señoras que...". A buen entendedor... Carol se había colocado muy responsablemente unos metros más atrás y acorde a su ritmo.
Para que engañarnos, justo hacía un año de lo de Cher, mi Princesa de Terciopelo y mentiría al decir que hoy no me acordaba o que no iba por ella.
Matías Prats da la salida con su habitual desparpajo y salimos lanzados. Cojo un buen hueco y me sitúo a la derecha como siempre. Los primeros momentos son peores que los finales con el cuerpo tratando de adaptarse al ritmo, respiración, frecuencia cardiaca... Salgo de El Retiro y entonces me coge un buen compañero: "¡Vamos Juanqui!". Es Carlos Barco que va fortísimo. Le veo genial y se lo digo. Primer kilometro pasado en 3:49... ¡Espera espera! O está mal medido o voy muy tranquilo, demasiado. Por suerte era la primera sospecha. Avanzamos Menendez Pelayo juntos, mano a mano disfrutándo una barbaridad y la adrenalina y euforia de aquello me impiden guardármelo y tengo que decírselo. Esa energía positiva me retroalimenta de una manera extraña: lejos de agotarme, me ayuda a tirar hacia delante.
Antes de encarar Reina Cristina le digo que tire, le veo con fuerzas para ello y por fin me hace caso, ya que fuimos juntos mucho rato. LLevo a Carlos unos 10 metros por delante y verle así de bien me anima mucho. Avanzo animando a algun corredor que me pasa y mantengo el ritmo. Al giro hacia Alfonso XII llego con fuerzas consciente de al menos unos 750 metros con desnivel: La Cuesta del Ángel Caído. Son muchas carreras ya subiéndola y no va a resultar un obstáculo para seguir avanzando, lo cual no signifíca que sea fácil. Visualizo a pocos corredores delante y me percato que voy 5º del cincomil a la par que me lo grita un espectador de la carrera. Avanzo y avanzo. "El Diablo" empuja en contra mía girando la horizontal, convirtiendo una cuesta en algo más, pero no decaigo. Adelanto con motivación al 4º y le animo: "¡vamos crack!", con el poco aire que tengo para ello. Me pregunta que a que ritmo voy y más cosas y no me parece momento para charlar.
Sonaba en mi cabeza de nuevo "You know my name" de Chris Cornell. Me despego un poco y al acabar la cuesta veo al 3º a tan solo unos 20 metros. Me invade cierto agobio de podio y es entonces cuando ocurre el momento mágico que ocurrió el año pasado. Cuando más la necesitaba, allí apareció ella: peludita, con sus suaves colores blanco y negro, su esbelta y más que elegante forma de correr, Cher aparece a mi lado haciendo que me explote el corazón, hirviendo en adrenalina pura. Corre a mi lado y en el momento preciso gira su cabecita hacia arriba y me mira: "No te agobies tío Juanqui, no tienes por que cogerle". Me mira, la miro, ¡la veo!. Casi puedo tocarla. Corriendo con sus patitas finas no se despega de mí ni un momento y hace que desaparezca esa oscura y sucia obsesión del podio. No podía apartarla de mi cabeza desde el inicio de la carrera y desde mucho antes. Y justo salió a ayudarme cuando más la necesitaba. Irónicamente me invade una paz interior a pesar de ir a un ritmo bastante alto para mí. Recorto distancia con el 3º y pienso que en la recta, cuando lo doy todo, será lo que "korima" quiera. Giro a la derecha para encarar la recta final mientras los asistentes aplauden y me inundan de energía cuando... ¡ouch! 15 metros definen la linea de llegada, 15 metros donde, por que no, esprinto con todo lo que puedo de nuevo a pesar de entrar holgadamente en 4ª posición con 17:49. "Va por tí Cher" pienso desde lo más profundo mientras miro y la señalo arriba. Gracias Princesita mía, aquello ha estado genial y siempre te llevaré dentro.
Fran llegaría un poquito después con la 1º mujer y cuidado por que atrás venía la 2ª, arrolladora pero con su curiosa calma: ¡Lau entraba 2ª de su categoría!
Me abrazo con Fran celebrándolo y me voy corriendo a por Carol. Voy animando a los corredores que se dirigen a meta y algun espectador me pregunta entre asombro y sonrisa si no he tenido suficiente con la carrera. Me cruzo con Jorge Depe, de profesión Galo, a toda máquina, feliz, con esa filosofía que le va a llevar muy lejos en este ámbito y en cualquier otro. Y entonces la veo. La reconozco con su personal estilo de correr entre más corredores, y Carol me recibe con una sonrisa en la cara. ¡Vas genial nenaaaaaa! La ánimo sin agobiarla y voy a su lado hasta el final sin cruzar el recorrido final para molestar lo menos posible. 25:53 sería su marcaza rebajando varios minutos la última que hizo en este recorrido y con 22º posición de su categoría.
Esperamos al podio de Lau y nos vamos a casa para acabar desayunando los 4 juntos y dirigirnos con Vane a ver a los sobris peludos y a decirle a Gon y Rose que otra vez, ELLA VOLVIÓ para ayudarme.
Camino hacia la salida hacemos el calentamiento más corto de nuestra historia, pero si queremos colocarnos bien no hay más: no es que fuera lo más correcto pero así sale la cosa. Supongo que lo mismo debían pensar las corredoras, que con todo mi respeto, no debían estar allí colocadas: "Señoras que...". A buen entendedor... Carol se había colocado muy responsablemente unos metros más atrás y acorde a su ritmo.
¡De rojo! |
Matías Prats da la salida con su habitual desparpajo y salimos lanzados. Cojo un buen hueco y me sitúo a la derecha como siempre. Los primeros momentos son peores que los finales con el cuerpo tratando de adaptarse al ritmo, respiración, frecuencia cardiaca... Salgo de El Retiro y entonces me coge un buen compañero: "¡Vamos Juanqui!". Es Carlos Barco que va fortísimo. Le veo genial y se lo digo. Primer kilometro pasado en 3:49... ¡Espera espera! O está mal medido o voy muy tranquilo, demasiado. Por suerte era la primera sospecha. Avanzamos Menendez Pelayo juntos, mano a mano disfrutándo una barbaridad y la adrenalina y euforia de aquello me impiden guardármelo y tengo que decírselo. Esa energía positiva me retroalimenta de una manera extraña: lejos de agotarme, me ayuda a tirar hacia delante.
Antes de encarar Reina Cristina le digo que tire, le veo con fuerzas para ello y por fin me hace caso, ya que fuimos juntos mucho rato. LLevo a Carlos unos 10 metros por delante y verle así de bien me anima mucho. Avanzo animando a algun corredor que me pasa y mantengo el ritmo. Al giro hacia Alfonso XII llego con fuerzas consciente de al menos unos 750 metros con desnivel: La Cuesta del Ángel Caído. Son muchas carreras ya subiéndola y no va a resultar un obstáculo para seguir avanzando, lo cual no signifíca que sea fácil. Visualizo a pocos corredores delante y me percato que voy 5º del cincomil a la par que me lo grita un espectador de la carrera. Avanzo y avanzo. "El Diablo" empuja en contra mía girando la horizontal, convirtiendo una cuesta en algo más, pero no decaigo. Adelanto con motivación al 4º y le animo: "¡vamos crack!", con el poco aire que tengo para ello. Me pregunta que a que ritmo voy y más cosas y no me parece momento para charlar.
Sonaba en mi cabeza de nuevo "You know my name" de Chris Cornell. Me despego un poco y al acabar la cuesta veo al 3º a tan solo unos 20 metros. Me invade cierto agobio de podio y es entonces cuando ocurre el momento mágico que ocurrió el año pasado. Cuando más la necesitaba, allí apareció ella: peludita, con sus suaves colores blanco y negro, su esbelta y más que elegante forma de correr, Cher aparece a mi lado haciendo que me explote el corazón, hirviendo en adrenalina pura. Corre a mi lado y en el momento preciso gira su cabecita hacia arriba y me mira: "No te agobies tío Juanqui, no tienes por que cogerle". Me mira, la miro, ¡la veo!. Casi puedo tocarla. Corriendo con sus patitas finas no se despega de mí ni un momento y hace que desaparezca esa oscura y sucia obsesión del podio. No podía apartarla de mi cabeza desde el inicio de la carrera y desde mucho antes. Y justo salió a ayudarme cuando más la necesitaba. Irónicamente me invade una paz interior a pesar de ir a un ritmo bastante alto para mí. Recorto distancia con el 3º y pienso que en la recta, cuando lo doy todo, será lo que "korima" quiera. Giro a la derecha para encarar la recta final mientras los asistentes aplauden y me inundan de energía cuando... ¡ouch! 15 metros definen la linea de llegada, 15 metros donde, por que no, esprinto con todo lo que puedo de nuevo a pesar de entrar holgadamente en 4ª posición con 17:49. "Va por tí Cher" pienso desde lo más profundo mientras miro y la señalo arriba. Gracias Princesita mía, aquello ha estado genial y siempre te llevaré dentro.
En la del medio emulando a Eric Lidell, ¿Qué no? |
Me abrazo con Fran celebrándolo y me voy corriendo a por Carol. Voy animando a los corredores que se dirigen a meta y algun espectador me pregunta entre asombro y sonrisa si no he tenido suficiente con la carrera. Me cruzo con Jorge Depe, de profesión Galo, a toda máquina, feliz, con esa filosofía que le va a llevar muy lejos en este ámbito y en cualquier otro. Y entonces la veo. La reconozco con su personal estilo de correr entre más corredores, y Carol me recibe con una sonrisa en la cara. ¡Vas genial nenaaaaaa! La ánimo sin agobiarla y voy a su lado hasta el final sin cruzar el recorrido final para molestar lo menos posible. 25:53 sería su marcaza rebajando varios minutos la última que hizo en este recorrido y con 22º posición de su categoría.
¡Esto es correr, bravo Carol! |
Valoración final en
El Calidómetro
ais que llorera....
ResponderEliminarEmotiva carrera,para nosotros por Cher y para muchísimos allí por su motivo solidario...muchos son los corredores que dedican esta carrera, q dan su cuerpo y su alma por una causa que nos une a hacer el loco un domingo tan temprano!!! esta sí es una buena razón de reunión para el deporte....
SI. No pensé que reaccionara de esta manera, "encontrándome" de nuevo con Cher y tenéndola TAN TAN presente. Aquello fue fantástico.
EliminarBesos nenu
Que bien contado! Carros de fuego total!
ResponderEliminarTienes toda la razón del mundo, a mi me pasa lo mismo, durante una carrera no es momento para ponerse a charlar jejejeje
Por lo que me han comentado, la medición del 10.000 sale mas o menos bien, la del 5.000 no lo sé ... recuerdo que el año pasado tenías una recta mucho mas larga y adelantaste a dos con un ataque brutal!
Un dia menos para la Vallecana!
Un abrazo compañero!
Al parecer medía de más el 5.000 pero no me quita el sueño ;)
EliminarVallecas espera amigo y allí en la linea de salida como el año pasado, espero encontrarte.
Un abrazazo
Desde luego muy buena carrera y terminando con tan buena compañia!!!. Carol un carrerón!!!!.
ResponderEliminarLa Vallecana te espera.
Gracias Halfon, ¡todos alucinamos con Carol y su sonrisa!
EliminarEnhorabuena Juanqui !! Gran carrera, gran puesto y grande Cher. Un saludo compañero
ResponderEliminarGracias tío. Sí, grande Cher: cariñosa, delicada y elegante. Aún siento su pelito de terciopelo.
EliminarUn abrazazo enorme Felipe.
Que habilidad tienes para sacarme el lado sensiblero, "cabroncete". Jejejejejej.
ResponderEliminarFelicidades de nuevo por otro carreron amigo.
Un fuerte abrazo.
Me alegra eso Korrecaminos. Me alegra alcanzar tu "patata" y poder tocarla.
EliminarGracias por todo.
Un abrazazo
A mi me salieron 5.200 metros, lo cual significarón 200 metros más de disfrute.
ResponderEliminarLa verdad, cuando estaba en la penultima recta y vi un tipo en tirantes corriendo en dirección contraria lo tuve bien claro "Este es Juanqui que va a por Carol".
Me gusta, me gusta mucho recibir tus animos y pasar meta, girarme (o girarme y pasar meta) y que al poco venga Carol. Menuda sonrisota que trae la tia, puro Gala arriba!!!
Felicidades a todos,
Si Galo, grandes momentos. Todo es mejor con la sonrisa puesta. Mientras las furzas lo permitan y llegue antes a meta, ¡siempre iré a buscaros!
EliminarUn abrazazo
Que bonito y que grande eres jodío, a ti si que no hay quien te "Ponga Freno".
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Manu, incombustible Manu, EL CUENTAKILOMETROS.
ResponderEliminarUn abrazazo