5 jun 2023

Adidas Ultraboost 21

Uno de los buques insignia de la firma alemana en mis pies para poder testearlo (gracias Pablo). Hacía míucho que probaba unas Adidas, que tan buenos resultados me dieron en las temporadas que las tuve en uso.
Tenía ganas de darles un mordisco y ver que tal estaban. Es una zapatilla que a priori y visualmente parece muy "mazacote" pero engaña. Sus 310 g se sienten a la vez ligeros cuando te pones en marcha. Obviamente hablando de unas zapatilla rodadoras tampoco resulta nada descabellado.

El upper es una maravilla, llamado aquí PrimeKnit+ queda como un guante, se adapta, coge la forma de tu horma y se queda así. Da gusto ver como ajusta de bien, probablemente uno de sus puntos más fuertes y más infravalorados. Desde luego se sienten super cómodas. Eso si y dada su densidad tenía que tener algún pero: es posible que con mucho calor se presente algún problema de transpirabilidad.

Una especie de armazón plástico envuelve la parte media del pie haciendo que el ajuste sea aún mas perfecto. He echado en falta algo más de protección en el talón la verdad.

La media suela realizada en Boost, 
el material más pesado de adidas, el cual fue un Boom hace años, ahora superado por el lightstrike, lighstrike pro y bounce, pero que aportará durabilidad a la infinidad de kilometros para los que ha sido construida esta zapatilla.

Este Boost se siente más firme en cuanto a sensación, pensé que sería más blandito aún de lo que aparentaba, aunque un punto fuerte es la reactivida que muestra. 

Abajo en la suela, realizada de Continental, tienen el sistema, Linear Energy Push, L.E.P. que aumenta la rigidez del antepié y mediopié para dar un empujón de energía adicional y que diría que viene a sustituir el famoso Torsión que la marca teutona ha venido mostrando en tantos modelos anteriores. 
Realizadas con Primeblue, un material reciclado de alto rendimiento que contiene Parley Ocean Plastic y un mínimo de 90% de material reciclado lo cual es un detalle que se agradece.

En carrera se sienten hipercómodas, con buen rebote y respuesta, hechas para recibir kilometros y kilometros y merendar kilometros como si nada. No es una zapatilla con la que te sientas especialmente hábil pero son para lo que son. Buen agarre en pista y una apariencia pesada que engaña, pues zancada a zancada deja patente todo lo contrario.

Tienen un peso 310 g y un drop 10 mm.

30 may 2023

I Carrera "Las 4 Millas de Barcience"

Encontré “Las 4 millas de Barcience” como quien encuentra un producto nuevo en el supermercado. Mentiría diciendo cualquier otra cosa. Además sería difícil siendo la primera edición. Estaba buscando unas carreras con más tradición que se daban cerca de la parcela de mis queridos suegros cuando di con ella. 10 euros la inscripción y competiciones infantiles gratis. Un gran atractivo para los tiempos que corren. Carlos apuntado y yo también.


El día anterior, fuimos a por el dorsal y hubo un problema para entregármelo. Nada que no solucionara una sincera y personal disculpa por parte de la organización “Bike & Pelotis” que demostró dar la talla. El recorrido era descrito como fácil pero no lo era. Para empezar era mixto, tierra y asfalto con lo que descarte las Vaporfly y opte por sus hermanas pequeñas, las cuales las tengo relegadas a una buena tarea semanal con las series: NIKE Zoomfly 4. Cierto desnivel en algún tramo y giros de 180º completarían el nivel de dificultad.


Allí acompañados y muy bien apoyados por Carol y su Maripaz, mi Suegri, el día de la carrera nos presentamos con una hora antes de la salida de Carlos. 100 metros no competitivos que hizo genial. Siempre le doy dos “trucos” para que una carrera vaya guay: no salir a tope y disfrutar. Esta vez y dada la distancia jibarizada que le tocaba le dije que olvidara el primer truco. Salió a todo lo que daba hasta que llegó. Bolsa de dulces y medalla conmemorativa para todos los peques, detallazos.


Me voy a la línea de salida y tal y como me dijo Schumy en su momento, ocurrió lo que me dijo: “te vas a encontrar un nivel muy alto”. Así fué. La verdad que flipé que gente de Castellon hubiera venido a correr. Club Bikila, Marathon, Training Rey… y unos cuantos más.

¡“Pum”! Salida hecha y salgo por la derecha mientras Carol me lanza ánimos. En tan solo unos 100 metros ya ha habido unos tres giros. Salgo algo rápido y aguanto entre los 20 primeros de unos 500 inscritos. Hace bastante calor y en la primera vuelta ya voy empapado. Allí Carol de nuevo, se encuentra animándome. 


Empiezo a notar algo de fatiga y la mala gestión de los primeros kilómetros. Luego me daria cuenta de que tanto giro y tierra contribuirían a mi “mala gestión” para encontrarme de ese modo y que no había distribuido tan mal los ritmos. Pasada la mitad de la carrera, pasamos por un desvío diferente y nos animan diciendo que apenas queda un kilómetro. ¡Si eran 7! Una equivocación haría la carrera algo más corta (5.600 m), con lo que ignorante de aquello mantengo el ritmo que llevaba (3:45) mientras agoto los últimos metros del recorrido atravesando una de las mayores cuestas que tenía. Una vez subida aumento un poco el ritmo hasta llegar a meta acabando el 24º de la general y 10º de categoría con 21:21.


Buena organización salvando la equivocación del recorrido y una bolsa del corredor que deberían de copiar el 90% de las carreras. Calculo que entre la camiseta 42kRunning, aceite balsámico, barritas de cereales, snacks y mochila había algo más de 30€.


La organización invitó luego a cervezas a todos. Gran día y gran carrera para tener en cuenta.


26 may 2023

Carrera En Marcha contra el cáncer (4 km)

Con el único proposito de colaborar con la causa y dedicarselo a mi Enorme Cuñi, me propuse otro año más apuntarme y hacer un recorrido lo más ligerito posible de ritmo.


Mi mami, Marga y otra amiga también se apuntaron como cada año, al igual que Lau. Es impresionante como cada año retiene mayor afluencia esta carrera logrando un poder de convocatoria muy grande. Ojalá algún año no haya que correr por este motivo y hubiera que cancelarla. 

En moto hacia Colón con Carol, no podíamos reprimir la emoción de este evento. Recordamos cada día a Tío Mario, pero hoy un poquito más fuerte y sobre todo dedicándoselo a él. #yocorropor Mario, rezaba nuestro dorsal. Incluso Carol se había vinilado esto en su camiseta. Y de este modo con la lágrima a punto de caer del ojo, dejamos la moto y vamos calentando hacia la linea de salida. Allí busco a mi madre pero no nos vemos. A quién si vería es a Héctor, otro grande de este deporte que corría por su motivo 
propio (enhorabuena de las grandes).

Me despido de Carol que saldría un poco más detrás y me coloco en una tercera línea junto a Héctor. Allí esperamos al pistoletazo y... ¡pum! salimos. Recuerdo a fuego el año pasado en este mismo sitio y como las emociones me desbordaron tanto que corrí con escaso coco, saliendo a un ritmo demasiado rápido y poniéndome en cabeza para luego pegar el petardazo y llegar en 10º posición a punto de reventar. Este año no iba a pasarme lo mismo. Así que con todo el coco del mundo y los entrenos y ritmos bien grabados, salgo relativamente rápido. Un peli por delante esta Lau a la que alcanzo y la doy ánimos mientras estoy a su lado y subimos Castellana. Un poco más adelante me despego poco a poco y tiro hacia delante. El Tío Mario está en el coco desde antes de la salida y vaya como empuja. Al giro de los dos kilometros, mitad de carrera, mantengo el ritmo e incluso permito subir un poco más mientras no paro de mirar hacia mi izquierda en busca de Carol y mi madre.


Voy fresco, sensaciones brutalmente buenas y con fuerzas para más. Veo a Carol a unos 100 metros y me acerco a la mediana de la carretera y me grita "¡busca a Vane!". La verdad que mentiría si dijera que aquello no me dio otro gran subidón. Y tampoco diría la verdad si dijera que no había tenido cierto pálpito de que iba a venir. De esas sensaciones mágicas.


Tiro y tiro y algo más abajo mi Madre me grita junto a Marga y otra amiga, adrenalina a tope y Tio Mario dándome caña: "Vamos rídiculo, aprieta ahora", parece susurrarme mientras me acerco a meta. Y es a falta de unos 300 metros cuando viendo el arco de meta empiezo a meter un largo sprint, de esos que piensas que quizás no aguantes todo el rato. Pero no soy corredor fácil para rendirme. Así que aguanto mientras disfruto una animalada y veo a Fran y a su Mami animarnos a la derecha. 


Entro en meta y veo a Vane debajo del arco sacándonos fotos. Giro total y me tiro a su lado en el suelo mientras lloramos abrazados como dos locos. Sensaciones difíciles de olvidar y una extraña mezcla de tristeza y alegría armoniosamente mezcladas.

Al rato llega Carol y los tres avanzamos hasta el final para ir a recoger y animar a mi Madre y sus amigas.

Carol acabando genial en 24:59, Lau 1ª y yo 14º con un 14:38.

Día muy, muy especial para enmarcar. Gracias Vane. Gracias Tío Mario.


22 mar 2023

Carrera del Agua 2023 (10 km)

"Como salir descontrolado y llegar a la meta para contarlo."

Así podría definir esta carrera si necesitara un titulo peliculero.


Con todas las papeletas para hacer una buena marca cercana a la que hice en el Derbi de las Aficiones, los astros se alinearon para conjugar una serie de factores que hicieron que el autor que escribe estas palabras saliera al pistoletazo de inicio como un corredor novel, totalmente inexperto y con hambre de kilometros, mucha hambre. Y cuando comes muy deprisa ya sabes lo que ocurre, aquello se te acaba atragantando.

Las semanas posteriores a la Sansil habían sido muy concienzudas a base de ritmos lentos y rodajes en los que iba aumentando poco a poco su duración, tras la lesión que tuve hacía ya más de un mes. Luego encaré el siguiente mes y medio previo a esa carrera con los entrenos de calidad y muy, muy agradecido de poder volver a dar una zancada tras otra.

Y llegaba bien. Fuerte, pero con unas ansias que no eran muy buenas. Tenia como una especie de "energía" que desquitarme de La Vallecana y no elegí el mejor modo.


Así que como relataba más arriba, tras la salida, teniendo sensaciones no muy rápidas, salgo disparado por delante de Schumy y muy pegado a Jose Ramón, amigo y un gran atleta de toda la vida que buscaba una marca similar a la que yo esperaba hacer. Me encuentro genial, muy fresco y cuando miro el crono me asombra ver 3:31 de ritmo. En vez de echar cabeza 
como siempre tiro hacia delante presa del frenesí que tenía en mi interior. Me encuentro genial y muy suelto. Algo de inseguridad iba acrecentándome al cruzar el segundo kilometro demasiado rápido. Aquello no podía acabar bien. Así que continuo así hasta que al pasar el kilometro 5 comienza el desnivel más pronunciado. 4:07 min/km: una irregularidad de campeonato para mi. Paso del avituallamiento y continuo. Asombrosamente llevo el coco genial a pesar de la locura de ritmo destapada al inicio y estoy disfrutando muchísimo.


Siendo el Día del Padre parece adecuado que durante la parte final de la subida a la Calle Pradillo e irónicamente cuando más pensé que sufriría me viene a la cabeza el nacimiento de mi hijo y me emociono. Se convierte en el mejor momento de la carrera. Trato de aumentar el ritmo para recuperar lo perdido. No voy tan alto de pulso como pensaba y atravieso todo Pradillo cruzando Cuatro Caminos mientras sigo subiendo las marchas.


Una equivocación por mi parte me haría meter la penúltima marcha a falta de más de un kilometro para el final. Adelanto varios corredores y alguno se me une. Se me apodera por momentos la inseguridad de que no aguantaré a ese ritmo hasta el final de la prueba: 3:31 min/km. Así que aguanto sabiendo que Carol y Carlos están en meta y falta nada para verles. Cuando vislumbro que la meta no esta donde esperaba sino que faltan unos 200 metros más cambio el chip y aprieto más, no es el momento de aflojar: 3:00 min/km hasta el final. A la izquierda los míos: Carol y Carlos me gritan y no puedo recibir mejor regalo que tenerles por allí.



Cruzo el arco en 38:14 oficial con cierta espina en el corazón de no haberlo hecho como sé: "lo mejor que puedo". Pero aprendiendo de esta prepararemos mejor la siguiente. Aquello no eclipsó el gran disfrute que tuve durante toda la carrera. Schumy hizo un gran tiempo (36:08), Lau quedó 2ª y Fran corrió una de sus mejores carreras con 38:30.



16 mar 2023

Asics Metaracer

He tenido la fortuna de poder testar las Asics Metaracer (gracias Isma, conóces el aprecio que te tengo) un modelo de la marca Nipona sobre todo enfocado a la competición.
Lo primero que me llamó la atención fue la simplicidad de su construcción a pesar de ser una de sus tope de gama. Ajuste cómodo y en general muy confortables. Son unas zapas muy ligeras, apenas 190 gramos. Lo siguiente que me sorprendió fue la suela "poco alta" en comparación a otros modelos con placa. Pero creo que todo esto tiene una finalidad que entendí más adelante.
El upper es tremendamente ventilado, confeccionado en un mesh elástico y diseñado para capturar tanto flujo de aire como sea posible. No creo que sea una zapatilla con la que vayas a pasar calor. Además esta realizado con tecnología repelente al agua. Es algo flexible y ajusta bien, aunque hecho en falta un toque más para ser perfectas en este punto. El empeine tiene puertos de drenaje para liberar agua que pueda entrar en la zapatilla. Cordones muy normalitos para una zapatilla de esta envergadura. No he reconocido ningún sistema de ajuste unido a los mismos lo que la acerca más aún a sistemas más tradicionales (cuando hablo de tradicional no tiene que significar propiamente malo).
He echado en falta algo más de protección en el tobillo, no sé como se comportará en distancias largas como la maratón.

La mediasuela esta formada por la espuma Flytefoam y en cantidades moderadas lo que hace que tenga menos sensación de reactividad pero si un buen contacto con el suelo y una pegada/respuesta brutal. Es en esta parte en lo que más me ha recordado a las zapatillas voladoras más tradicionales. En ocasiones me dio la impresión de volver a estar enfundado en las maravillosas Hyperspeed. Me parece un modelo excepcional como puente a otras zapatillas más "extremas" con suelas más altas. Debajo del Flytefoam tenemos una placa de carbono que se siente presente y más a un en ritmos inferiores a 4 min/km y que en la zona más delantera se dividide en unas alas laterales que dejan libre la zona medialLa forma de la mediasuela sigue la línea de toda la serie Ride (Glideride y Evoride).

La suela con tecnología ASICSGRIP™ que brinda una tracción excelente, es tremendamente minimalista, con pocas formas que me hacen dudar un poquito de su agarre en terrenos húmedos. Además esta hecha sin cortes y con una lámina protectora de AHAR Grip en la zona delantera de la zapatilla para alargar la durabilidad y mejorar el despegue.
En carrera las sensaciones han sido buenísimas. Durante el poco tiempo que las he podido testar, me han transmitido una explosiva mezcla entre zapatillas más tradicionales con una mediasuela muy baja y las más presentes con elevadas mediasuelas. Según aumentas la velocidad son unas zapas que trasladan toda la energía respondiendo al instante.

Peso de 190 g y drop de 9 mm.

2 mar 2023

Nike Air Zoom Pegasus 39

El modelo más emblemático de la marca no falta a su cita año tras año. Las Pegasus han pasado por muchas formas y colores a lo largo de los años, pero quizás en su versión anterior, la 38 y la 37 pegaron un estirón en una dirección... que no era a la que apuntaba el caballo con alas en cuanto a funcionalidad del modelo.


La 37 y 38 pasaron a un modelo muy racing, muy de competición, algo heredada de las 35 y 36. El hecho de que fueran casi unas zapatillas mixtas por la forma de su horma, del upper y de otros elementos como la lengüeta las alejaban del terreno para el cual la marca las había posicionado durante casi 40 años. Por eso aprovecho por aquí para actualizar que las 37 y 38 son ideales para ritmos algo más vivos que los rodajes: aplicadas en ritmos controlados e incluso series, van a irnos fenomenal.
Solo ver en la foto de arriba la 37 y la 39 parecen zapatillas y modelos de marcas diferentes.

Pero volviendo al modelo 39 hay que decir que han hecho una necesaria regresión al pasado
Comencemos hablando de un upper renovado bastante más transpirable que el anterior fabricado en Engineered Mesh, más resistente y flexible que una malla normal y con unos estampados, por que no, bastante atractivos. La lengüeta está separada de la parte superior para ofrecer espacio y adaptarse a diferentes formas de pie manteniendo un buen acolchado.


Vuelta a la tecnología Flywire que tan buenos resultados había dado yq ue de algún modo en anteriores versiones se había sustituido por esa pieza 3D a la qu Eno logro sacar nombre técnico, Esta integrada con una banda en el mediopié para ofrecer una sujeción total y ayudar a que el pie no se mueva.



En la mediasuela nos encontramos como casi siempre en modelos rodadores, Nike React dando una pisada suave y reactiva. Aquí es donde han vuelto a cinco años en el pasado, aligual que en el modelo 34, combinando dos unidades Air Zoom en el antepié y el talón para proporcionar una transición suave desde el talón hasta la puntera.


La suela exterior de goma ha cambiado ligeramente, manteniendo un patrón parecido entre el exterior e interior.  El talón se ha rediseñado reduciendo la característica punta que suelen traer cada modelo. 


En carrera es una zapatilla muy estable, ha perdido algo de versatilidad para entrenos muy rápidos en comparación con las dos anteriores versiones pero como ya sabemos es una zapatilla cuya función se enfoca en rodajes largos y más tranquilos. La amortiguación vuelve a dar sensación de protección al pies vayas al ritmo que vayas con una pisada suave y la comodidad es uno de sus puntos fuertes. El ajuste es bastante bueno.


Tiene un peso de 272 g y un drop de 10 mm.





16 ene 2023

San Silvestre Vallecana 2022 (10 km)

Y desde septiembre, iba cumpliendo, día a día y semana a semana el nuevo plan de entreno, sin duda, el más metódico, "sencillo" y con mucha medida para no pasarnos. Y de la manera más tonta y no corriendo, yo, el chico que corre y nunca se lesiona, pues eso, me lesiono. Algo en la rodilla me interrumpió un grandioso jueves que auguraban buenas series de mil en el bosque de Valdebebas con Fran, Antonio y Schumy. Lo único que pude hacer tras el calentamiento fue irme a casa, que me tratará Carol con su magnifico shiatsu del que hablaré más adelante dedicando una entrada y reposar. Reposar días y días, suplicando al cielo poder correr la Vallecana aunque estuviera fuera de forma. Auguraba una buena marca cercana a los 36:30 o menos pero tan solo me conformaba con correr de algún modo esa noche mágica que ya, después de unos 13 años no dejaba de correr.


Y de algún modo, el 31 a las 16:30 me encontraba en Concha Espina, ataviado con mis Nike Vaporfly y totalmente fuera de forma pero agradecido por poder correrla.Con Fran y Lau, Schumy y Dani y todos los Lunes de Recuperación, mientras Dj Nano pinchaba Every time we touch, mi corazón bombeaba adrenalina a chorros. Podría definir perfectamente mi carrera como "Salí, sonreí y llegué a meta". Porque en el fondo fué así. Tras el pistoletazo de salida salgo controlando con mi rodillera en la pierna izquierda asombrosamente respondiendo bien pero con el miedo en el cuerpo, temiendo que en algún momento tuviera que parar. Carol y mi padre aguardaban en meta y mi cabeza no imaginaba los pensamientos que mi chica podía estar barruntando. Kilometro a kilometro revivo cada momento de cada año, disfrutando a tope. Atravieso Serrano hacia abajo y me acuerdo mucho de Tío Mario como siempre. Hablamos mientras avanzo e intercambiamos palabras sobre Tía Vane. Gracias Cuñí por seguir cuidándola y hacer que siga adelante, ella es muy importante para nosotros.  

Podría decir que estaba disfrutando más que nunca, estando fuera de forma, con la rodilla hinchada... ¿irónico verdad? Pero más que nunca pude sentir esa gratitud de dar zancada tras zancada, de sonreír con cada inspiración. De sonreír al ver a Juan Carlos de Los Lunes con Mario y Helen animando al llegar a la Puerta de Alcalá, ¡qué subidón! ¡Y qué fotón!


Al bajar Recoletos me encuentro con Alberto Ramos y su hermano, ¡que alegrón! y al pasar al final de esta calle me viene a la cabeza mi hermana Laura, que a pesar de no haber podido venir a ninguna San Silvestre siempre y por alguna extraña razón de mi cabeza que desconozco, la he ubicado en este punto. Y nunca se lo he dicho y quizás se entere leyendo estás líneas. Toda mi musculatura inferior empieza a denotar cierta fatiga producto de casi el mes de inactividad. Aguanto. El disfrute me ayuda a ello.

Pasan ritmos entorno a 4:00 min/km y alguno de 3:50 que me causan un vértigo casí adictivo. Mi cuerpo desea más pero en el fondo no puede. Una sensación de lo más loca. Así que bajo el pistón porque no quiero arriesgar. Y menos mal, porque pasado el kilometro 7 mis piernas dicen que no están para esas velocidades. Normal, casí un mes parado acarrea lo suyo. Aguanto como nunca mezclando esa pesadez con la alegría y gratitud de estar allí corriendo junto a 41.000 personas más. Afortunado. La cuesta se hace difícil, pero recuerdo mi tesón en años anteriores subiéndola, manteniendo ritmo e incluso subiendo un pelin y junto a los ánimos de la gente tiro para arriba mientras infundo aliento a algún corredor con el que me cruzo. La rodilla aguanta. 


Giro a la derecha y visualizo el paso del kilometro 9. ¡Vamos! Sé que queda poco, visualizo a Carol y mi Papi y aguanto mientras me doy cuenta de que voy sub 42, no estaría mal asegurar cajón para el año que viene. Y tiro y tiro. Y el globo queda atrás. Y mientras avanzo por Martinez de la Riva y llego a la Calle diligencia miro hacia donde se pone Carol año tras año. ¡Y está cortada! Las obras del Bernabéu hicieron adelantar la salida unos metros hacia delante y reubicar el final de la carrera. Tan solo alargando al siguiente giro a la derecha imagino que Carol estará allí. ¡Vamos! me grita al unísono con mi padre y con Paco el padre de Fran. El subidón e impresionante y eso que probablemente vaya en uno de los tramos mas lentos de mis carreras. Da igual. La pasión y el disfrute lo ignoran todo y me hacen subir el ritmo para acelerar en meta y lograr un 41:46 a ritmo de 4.10. La sonrisa me recorre de oreja a oreja. ¡He podido correr! Al final todo se resume a eso, a algo básico. Si algún día te puede la presión por algo como esto, hecho para disfrutar, recuerda porque lo haces. En el fondo todo se resume a eso y es lo que más tira para delante. Porque podía haberme ahorrado todas estas líneas de sentimentalismo y pasión (cada entrada del blog lleva ambas) y haber puesto sin más que "salí, sonreí y llegué a meta".




14 dic 2022

Cross Popular de La Constitucion 2022 (8 km)

Con la organización de Eventsthinker se presentaba este Cross al que al menos nuestro pequeñín, Carlos iba a asistir. Mi participación estaba algo en duda por motivos de trabajo y al final de 8 horas de trabajo y con una antelación de 120 minutos... supe que iba a poder correrlo.

Así surgió la cosa, sin paños calientes. Aunque a mi lo que más me emocionaba era que Carlos corriese. Le mola mucho y sabe el universo que yo ni le fuerzo ni tiro más hacia este deporte para que lo haga: lo de disfrutar corriendo lo lleva en las venas (y seguro en los genes). Aí qsue el animado a correr, nosotros más.

Así que llegando a la vez a la zona de la prueba, me encontré con los míos: Fran y Lau con Axel y Mini y luego con Schumy, Auro y Samu. Embadurnado con el gel de calor Galius, fuimos a recoger los dorsales y se lo pusimos a Carlos. Cuando iba a ponerme a calentar y Carlos ya estaba expectante de su carrera "¿Papá cuánto vas a tardar?" me pregunta curioso. "Espero que poco", le contesto.


Línea de salida con Schumy y César y dan el pistoletazo de salida. Salgo controlando bien el ritmo para que no me pase la del año pasado. Son dos vueltas a un recorrido bastante duro y la primera sirve muy bien para medir las fuerzas de cada uno. Acompaño a Schumy hasta el primer kilometro y luego se empieza a despegar como era normal. El circuito comprende una serie de giros de 90 grados con bajadas y subidas muy alargadas que pueden "romperte" por completo sino cuidas un poco tus ritmos. Así que me centro en eso. En no pasarme de vueltas. Haciendo una amalgama, aún muy extraña, de mi antigua filosofía de correr por sensaciones y disfrute sin más a la nueva en la que trato de medirme de la manera más rigurosa posible. Y entonces sale algo, que si bien tiene mucho margen de mejora, denota algo de inexperiencia que con el tiempo estoy seguro de que irá ganando valor.


Disfruto mucho y controlo el ritmo, a la primera vuelta veo a Carol y Carlos, con Auro y Samu y Fran con Axel y Mini animándonos con fuerza y eso llega. Mi excompañera Cris anda por allí cortando las calles, un alegrón tremendo verla. Las Vaporfly responden genial, no tengo más que elogios para esta superzapatilla.


Sigo viendo a Schumy y Cesar a lo lejos mientras trato de mantener el ritmo y soportar los enormes desniveles que hacen famosa a esta carrera. La última vuelta va mejor encarada gracias a cierta prudencia inicial y el final queda cerca. Aguanto y aguanto deseoso de ver a los míos y pensando también en la carrera de Carlos. Dos rectas y sus curvas para la final y subo una marcha. Ahora sí, la sonrisa se me dispara y aprieto a tope, descubriendo un sprint que hacía mucho que no despertaba de esa manera.


30:04 y 25º posición absoluta y 16º de mi categoría. Muy contento de haber bajado un minuto del año pasado.

Carlos esta expectante. Le apetece mucho y no deja de preguntar por su carrera. Y eso que faltan la de todas las categorías superiores. Pero pasan y pasan... Y cuando menos lo espera, le decimos que le toca y su sonrisa es brutal: de oreja a oreja. 


Le digo: -"Colegui, para que te salga bien la carrera solo tienes que hacer dos cosas, una es no salir muy rápido y la otra es DISFRUTAR".  
"Vale Papá."

Carol le quita el abrigo y le damos dos besamos como dos soles y se va a la linea de salida. Pistoletazo y salgo disparado para acompañarle por fuera del recorrido. ¡Vamos! Me sale el orgullo por las orejas, no por verle correr sino por el disfrute que lleva. Por como afronta los 550 metros sin pararse, sin quejarse, regulándosela a su manera y "picándose" sanamente
con los demás mientras mira a su alrededor. Bracea y zancada tras zancada va dirigiéndoselo a meta donde Mamá espera orgullosa mientras yo no paro de animarle y motivarle, aunque no le hace falta. Ya lo tiene. Entra en meta cogiendo el aire que le falta, feliz por acabar y disfrutar de ese momento tan curioso que te transfiere el correr.


Gran día, acabando con los amigos comiendo juntos y alargando el disfrute aún más.


24 nov 2022

Derbi de las aficiones 2022 (10km)

Desde el paseo con los perretes sonaba en mi cabeza I Believe the enemy de Diognardi y no dejó de hacerlo hasta cruzar la meta. El día amaneció frío pero con la promesa de no descargar agua sobre nosotros. Así que besos mágicos en casa y a la salida con mi padre, ambos en moto y yo por mi parte muy agradecido de que me ayudara en la logística de carreras tan complicadas que empiezan en un sitio y acaban en otro bastante más desplazado. 

Caliento 10 minutos con mi Pegasus 37 y me calzo las Vaporfly Next% 2 para que mi padre se pueda ir con tiempo holgado a linea de meta. "-¿Qué son, 10 km? ¿Unos tres cuartos de hora?", me dice totalmente en serio. Medio sonrío diciéndole que espero bajar de 38 minutos. Mi padre me ha visto correr desde pequeño pero estaba perdido en ese momento con la marca que esperaba. Beso y agradecimiento y sigo calentando mientras me cruzo, con Julio, César, Paco, Carlos y Dumi de Los Lunes. Un alegrón. Y otro más al ver a Alberto con su hermano por allí. Si no nos vemos por Madrid nos vemos por Alcosebre en la costa mediterránea, jaja. Quique también andaba por allí y me da una enorme alegría verle, ¡Recupera el blog Jodío!. Mucho tiempo sin coincidir. Pena no ver a Marcos Del Valle ni a Fran y a Lau en la salida.

A línea de meta y superconcentrado mientras suenan los himnos de Merengues y Colchoneros, fiel a mi filosofía me centro en lo mío, con ganas de ver los primeros resultados reales de nuestro Eagle Smart Project. Pequeños saltitos para mantener la temperatura y veo a Jose Ángel Santiago. Pues otro alegrón. Y después de la cuenta atrás...

¡Pum! Salimos y no tengo la posibilidad de acelerarme como suelo, lo cual pienso rápidamente que me va a venir bien. Algo conservador al principio no me iría mal y encima en la parte "complicada" de la carrera que era al inicio. El resto cuesta abajo. Me siento genial, la nueva planificación se nota y mucho más al caer los kilómetros. Voy controlando la velocidad para no pasarme, debía ir sobre 3:45 y la mayoría me salen a 3:40. Podría decirse que voy descontrolado tras este breve análisis pero es que me voy "frenando" un poquito ya que algún tramo se me va a los 3:30. 


Castellana abajo y esta carrera es un verdadero tiro. Ya me había advertido Fran que no me confiara pero que iría más rápido de lo habitual. Y así es. Sinceramente, he de reconocer que no paso ni un kilometro agónico, voy disfrutando como siempre, con una sonrisa en la cara, animando a corredores a los que paso, a los que me pasan, a los que por lo que sea se quedan a un lado parados... Estoy disfrutando más de lo que pensaba y una pequeña parte de eso es por las Vaporfly Next% 2 que son divertidisímas y un par de cohetes en los pies.

¡Vamos! Al paso del ecuador de carrera me siento eufórico por el ritmo que llevo y a la vez confiado porque soy consciente de que no voy apretado ni al límite. Carlos y Carol en mi cabeza y de repente aparece él, sin previo aviso, con sus preciosos ojos claros, su descomunal tamaño, más grande aún de lo que recordaba y su barbita de varios días. -"¡Vamos man!". Joder, ¡es Tío Mario! No me lo esperaba. No lloro, no estoy triste. Sonrío, estoy casi emocionado de tenerle cerca. "Te echo mucho de menos", le digo. Él lo sabe pero no me contesta, me empuja hacia delante.


Irónicamente me mantengo alerta esperando alguna cuesta, algún repecho que nos ponga a cada uno en nuestro lugar mientras en mi cabeza sigue sonando I Believe the enemy con imágenes de tormenta y electricidad. Pasamos la Cibeles mientras suena el himno del Madrid y me acuerdo mucho de mi Papi, que estará esperándome en meta. Bajo sin aflojar el ritmo mientras miro atrás buscando la liebre de 38 minutos. Pero no veo globo. ¿Lo mismo van sin globo? Sigo a lo mío. Y caen los kilometros.

Vaya que si caen. Cuando pasamos al lado de Embajadores Tío Mario sigue empujándo y aparece el repecho que estaba buscando, poco empinado pero suficiente para placar mis ansias de desnivel. Es casi de risa desear eso en una carrera, pero lo deseo. Juro que lo deseé y en más de una ocasión.


Cuando menos lo espero, una bajada superempinada aparece y me dejo llevar. 3:30. Vale, la meta no debe de andar muy lejos. y... ¡aparece mi padre en la curva previa a la meta! Euforia a tope, puño al corazón y en dirección a él y aprieto más al ver el arco de meta próximo. Me invade la adrenalina a borbotones y me siento volar a unos ritmos que a día de hoy me hacen sentir por encima del asfalto. ¡Yeah! Gracias Tio Mario.  En meta me encuentro con casi todos los mencionados y luego con Lau y Fran, alegría doble.

Buscando un sub 38 para la San Silvestre Vallecana me encontré con un 36:49 que no esperaba. Si bien es cierto que la carrera tiene un desnivel muy fácil, como siempre decimos, hay que correrla. Y eso hice. Lo mejor que pude, con una sonrisa en la cara, acordándome de los míos y con la ayuda especial de Cuñi Grandullón (gracias), sé que estas siempre con nosotros.

Vamos Vallecas, nos veremos de nuevo pronto. 








13 nov 2022

Nike Vaporfly Next% 2

Tenía muchas ganas de probarla. Para que engañarnos. Muy buenas sensaciones con las Zoomfly 4 pero me podía la curiosidad. En el Polideportivo de Rivas-Vaciamadrid tuve la suerte de coincidir con Mauro por un lado y por otro de disfrutar de su generosidad. Allí tenía las preciadas zapatillas y me dijo "¿quieres probarlas?". Y... ¿quién era yo para decir que no? Las sensaciones a priori me recordaron a las de las Zoomfly 4 pero con una reactividad y ligereza como nunca había experimentado salvo con los clavos.

Así que al cabo de los meses se acercó mi cumpleaños y... como decían en la ochentera Risky Business "A veces en la vida hay que decir ¡Pero qué coño!."

Llegaron a casa y tras maravillarme al verlas (tenían unos colores diferentes al resto con una franja en la mediasuela separando dos colores por lo que yo decidí que era un rayo) decidí estrenarlas en la próxima carrera, los 10 Km de Ciudad Lineal. Así que, hablemos de ella.


Si las sensaciones en la pista hacía meses me habían convencido, en la carrera fueron aun más brutales. Su terreno es el asfalto sin lugar a dudas por encima de cualquier otro y con casi una señal de advertencia de no usarlas fuera de él a consecuencia de incurrir en un desgaste innecesario.

Comenzemos por el upper. La principal mejora que traen con respecto a su antecesora ya que el novedoso vaporweave qué también traían las Zoomfly 3 era un material que se adaptaba peor al pie, buscando la referencia al agua, formando arrugas y deformaciones algo raras. La malla de esta versión en Enginered Mesh mejora todo eso, manteniendo una excelente transpiración, se adapta como un guante y mantiene una asombrosa ligereza. Con el tiempo veremos que tal va en desgaste. La lengüeta es casi papel de fumar, algo que me gusta mucho, ayuda al ajuste y resulta muy cómodo. En el ligero talón, algo reforzado sin pasarse en exceso, tenemos los Heel pods que ayudan tanto en la sujeción y que comparten con sus hermanas menores, las Zoomfly 4.

La mediasuela repite a su anterior versión y está compuesta en su totalidad con el magnífico ZoomX de Nike, un material que me parece increíble. Si con las Tempo Next% lo pude disfrutar bastante, con estas zapas es una gozada.Sobre todo llama la atención las sensaciones que tienes al día siguiente, con menos molestias de las que habitualmente se suelen tener, favoreciendo de algún modo la recuperación.La placa, íntegramente de carbono, ayuda en la propulsión y a estas alturas de la película resta decir que funciona. Mucho. Pero hay que correr, no van solas.

La suela vuelve a copiar a las anteriores Vaporfly. En el fondo si algo funciona, a veces no tienes que tocarlo. Al parecer (ya que no las he descuartizado ;) ) tienen una cápsula de espuma interna en el talón para ofrecer amortiguación adicional. Buen agarre en asfalto, como más arriba indicaba, no las recomendaría nada para tierra por el desgaste excesivo que podrían tener. 

En carrera las sensaciones son brutales. Divertido pero controlado, sería la frase. 
No he visto nunca semejante zapatilla con esa amortiguación y aún así una respuesta tan impresionante con un retorno de la energía tan brutal. Las zapas "te dan lo que le metes". A ritmos rápidos funcionan genial. Por debajo de 4:00 min/km responden a la perfección y en sub 3:30 es impresionante. Es verdad que son algo especificas para una pisada neutra y nada novata: algo de técnica y experiencia vienen casi en mayúsculas en su manual de instrucciones.
Con un peso de 200 g aproximadamente en mi talla (44,5) y un drop de 8 mm, el único pero de estos impresionantes neumáticos, es su precio, rondando los 250€. Si bien es cierto, es que salen ofertas rondando los 150€, de las que alguien como el autor de este blog se pudo beneficiar. Y tu también si las encuentras (mi comisión por este párrafo: CERO EUROS)

Por cierto el color de las mías, las de las fotos es el "Negro/Hyper Violet/Football Grey/Flash Crimson". Si, el nombre es largo pero mola un huevo. O dos.